Con motivo de la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente durante el pasado 5 de junio, desde nuestra escuela infantil de metodología Montessori queremos informaros sobre las actividades que hacemos con los niños y niñas en el centro gracias al huerto ecológico del que disponemos, y así concienciarlos desde bien pequeñitos de la relevancia de cuidar la naturaleza.
¿Qué es un huerto ecológico?
En nuestro caso, se trata de un espacio exterior, como es el patio del centro, destinado a plantar y cultivar frutas y hortalizas, con el objetivo de que los niños y niñas tengan una clase práctica de contacto con la naturaleza y comprendan así su funcionamiento, además de aprender a respetar el trabajo de campo que tantas veces queda denostado pese a su importancia. Puede que muchos de sus abuelitos o incluso sus papás tengan huertos en sus pueblos, y es una ocasión ideal para que sus hijos y nietos se familiaricen con su trabajo y puedan compartir momentos con ellos.
Lamentablemente, desde que se desató la pandemia de covid-19, hemos tenido que prescindir de la persona a cargo del huerto, por lo que actualmente las tareas que realizamos son otras. Sin embargo, esto solo es pasajero, pues estamos deseando retomar las labores agrícolas con los peques en cuanto todo vuelva a la normalidad. Por esa razón, en este post vamos a enumerar y comentar brevemente las actividades que desempeñábamos tanto antes como después de la propagación del virus.
Actividades que llevábamos a cabo antes de la covid-19.
- Regar el huerto. Para un niño es muy gratificante escuchar la respiración de la tierra cuando absorbe el agua.
- Observar el avance y crecimiento de las frutas y hortalizas plantadas. Como tomates, fresas, calabacines, etc.
- Echar abono ecológico al huerto. Se trata de un producto más sano a nivel medioambiental que los químicos y que no supone ningún tipo de riesgo para los niños y niñas, y que además les permitiría contarles a sus papás y mamás lo beneficioso que es para las plantitas.
- Recoger los productos sembrados. Cuando los productos ya estaban maduros, los niños y niñas se encargaban de recogerlos, depositándolos en unas cestitas, y se lo entregaban a la cocinera del cole para que ella pudiera prepararlos debidamente con el objetivo de que los peques pudieran alimentarse de los frutos que habían plantado y cuidado.
Actividades que llevamos a cabo después de la covid-19.
Como ya hemos explicado, a causa de las restricciones derivadas de la pandemia, hemos tenido que sustituir la plantación y cultivo de frutas y hortalizas en detrimento del riego y cuidado de flores, como la lavanda y otras tantas que han crecido en nuestro huerto. No es lo mismo, pero también es una forma de enseñar a los niños y niñas lo importante que es cuidar del medioambiente y de los seres vivos inanimados que lo engloban.
Y hasta aquí la entrada de hoy. Si tenéis alguna duda, no dudéis en contactar con nosotras a través del formulario de nuestra página web, vía llamada telefónica, o incluso presencialmente en nuestro centro de educación infantil Mi Cole en Ruzafa, Valencia.